UNA NOCHE CON TEINA
Hay historias que no duran mucho, pero sí lo suficiente como para dejarte despierta más de una noche. Como una taza de té demasiada cargada antes de dormir, él llegó así: suave al principio, pero con un efecto que no supe prever. Esta historia que voy a compartir contigo, se remonta a un tiempo atrás. Se trata de un tipo que conocí, que, obviamente como el 85% de mis aventuras, son al otro lado del océano...Esta vez, viajamos hasta Argentina. Nos encontramos en ese universo paralelo que es el mundo digital, donde las miradas no se cruzan, pero las palabras sí. Él, escribía bonito, hablaba lento, me preguntaba cosas con interés real. Y yo, que soy puro corazón cuando me ilusiono, me dejé llevar. Fue rápido, fue intenso. Hablábamos casi todos los días, compartimos audios, fotos, sueños. Me hablaba de venir a verme, de viajar, de sus planes, de una vida simple pero plena. Y yo, empecé a imaginarlo, como si ya lo conociera, como si el océano no importara tanto, creyendo q...