TRANQUILAMENTE ENAMORADA

 Muchas veces, pasamos mucho tiempo esperando que llegue ese amor que tanto deseamos, el hombre perfecto, sensible, detallista, atractivo, inteligente, que huela rico y se vista con "rollito", pero parece nunca llegar, quizás, porque nos desviamos del objetivo con gente que nos da ese click de adrenalina pasajera, y aunque sabemos que no nos dará el amor que merecemos, ese subidón en nuestro cuerpo mantiene enganchado a nuestro cerebro, y se nos olvida pensar con claridad.  

Hace tiempo que, aplico una regla que leí por redes sociales, se llama LET THEM, y la puedes usar para todo tipo de relaciones, amigas, amores, compañeros de trabajo, familiares, etc. Se trata de dejar actuar a la gente sin tratar de impedirlo con nuestros actos, evitando montar un drama. Es decir, que el chico que te gusta no quiere nada contigo?, okey LET THEM, déjalo que se vaya. No intentes retenerlo o buscar una explicación, pensando que es tu culpa, porque quizás no tenga nada que ver contigo. Simplemente cambia de página y déjalo irse. Otro caso, tu amiga te deja de hablar y se aleja sin darte ninguna explicación?, okey, LET THEM, déjala que algún motivo tendrá, y no es tu trabajo descubrirlo,  no te angusties pensando en que se fue. Tranquila ya vendrán nuevas amistades, te lo digo por experiencia propia en este último caso. Esta “regla” de LET THEM, como te he contado antes; consiste en no buscarle la quinta pata al gato, y dejar a la gente que actúe libremente sin que te afecte, RECUERDA: sólo puedes controlar lo que TÚ haces, y si pierdes energía tratando de controlar lo que el resto de la gente hace, o adivinar lo que les pasa por la mente, vas a desgastarte y créeme, no vale la pena.

“Cuando sueltas al amor de tu vida, llega el amor de tu vida”. Esta frase me la dijo un amigo hace mucho, y no puede gustarme más. Todo lo que mereces, y quiere abrazarte llegará a ti, cuando dejes de buscarlo y estés preparada/o para recibir.

Hace un tiempo, tuve un amor, breve, sí, has leído bien, he dicho BREVE, y he dicho AMOR, el cual me ha dejado una enseñanza que ha marcado un antes y un después en mi forma de sentir el amor, y sobre todo de enamorarme. Aunque me encantaría, no puedo contaros la historia con detalles,  debido a mi trabajo, y mi perfil abierto en redes sociales pero la dejaré un breve resumen. 

Juliet estaba trabajando en el avión, (ella era azafata de vuelo, aeromoza o cabin crew, como le digas en tu país), cuando de repente, vió entrar a un pasajero, el afortunado se llamaba TW, sus ojitos se iluminaron, y no dejaba de sonreír. Enseguida después de despegar, se reunió con sus compañeros al final del avión, y les dijo: “chicos he conocido al padre de mis hijos”, a lo que todos sonrieron, y dijeron: pero... quién es? Está aquí en el avión...?, Y ella respondió: sí, es un pasajero, y está sentado en el 32C. No puedo detallaros lo que fue el vuelo, pero sí comentar que fue un vuelo muy especial, y entretenido para todos. 

El flechazo era evidente, cada vez que intercambiaban miradas ambos sonreían y se sonrojaba. Tuvieron su primer cita en Miami, (destino a donde se dirija ese avión), ambos se quedaron embobados el uno con el otro. Las citas siguieron en Madrid, y en Alemania. Mensajes, videollamadas, llamadas, y así 24/7 mataban los días hasta volver a verse. La historia llegó a su final después de unos pocos meses, ya que la distancia no es un aliado de las relaciones amorosas. Juliet no estaba triste cuando decidieron no seguir la historia, ya que lo que ella había experimentado esta vez, además de amor, era paz. TW era una persona que le transmitía mucha paz, en persona, pero también a distancia, evidentemente también había todo lo demás, se gustaban físicamente, había mucha química pero esta vez no era una locura de adrenalina, como ese amor que creo es el que experimentamos todos, y el más "normal" o el amor que creemos es el que debemos sentir.

Después de esta breve historia, deduje varias cosas, porque siempre estoy aprendiendo y creciendo, y cada historia me deja alguna enseñanza. El amor no duele, no queremos estar locamente enamoradas, queremos estar sanamente enamoradas, y eso significa estar tranquilas. Sintiendo paz y no ansiedad.  Creo que ya no se trata de mariposas en el estómago, sino de tranquilidad en el corazón. Atrevete a vivir las historias de amor con pasión, sin pensar en su duración. Reconoce tu valor, y arriesgate, experimenta, y permítete sentir lo que quieras sin juzgarte (ya lo harán otros por ti), intenta sostenerte en medio del caos, siempre de la manera más amable que puedas contigo mismo/a. La vida sabe mejor cuando nos aventuramos a vivir historias atrevidas que nos quitan el miedo a apasionarnos, siempre estará nuestra mejor amiga para decirnos: "ay tía! pero si sale mal, la ostia va a ser terrible", y "luego te tengo que aguantar yo con el corazón roto". En este mundo, faltan más personas que vivan en grande, se apasionen a lo bestia y dejen a un lado el miedo a las caídas o al qué dirán. Eso es algo que tienes que experimentarlo tú, la pasión y las ganas no te las van a dar desde fuera.Yo no vivo mis aventuras amorosas para que la gente me aplauda, o para darles dos meses de chismes a mis amigas, las vivo porque me llegan o mejor dicho las dejo llegar a mi vida, porque vivo con pasión, independientemente de cual sea el resultado final, que, SPOILER, siempre es el mismo. 

Me despido con esta frase, que no es mía, pero me encanta; "confía en tu instinto, siempre sabe lo que tu corazón necesita".